Ya sea que apenas comiences a trabajar de forma remota o que lo hayas hecho por años, sabes que algo es cierto: Dar presentaciones virtuales por Zoom y otras plataformas de videoconferencias en línea puede ser todo un reto. Muchos profesionales sienten que las reuniones virtuales carecen de la emoción y la pasión que fluye naturalmente cuando nos comunicamos con alguien frente a frente. ¡Y tienen razón!
La energía es contagiosa.
Cuando te diriges a una audiencia en vivo, así se trate de un cliente o de 500, tu nivel de adrenalina sube y tu presentación refleja esa emoción. Por desgracia, es difícil imitar ese sentimiento en una presentación virtual que das desde tu casa, posiblemente, con tu gato dormido sobre tu escritorio. En esos casos, podría empezar a darte sueño también y podría notarse en tu comportamiento. La quietud y la calma son excelentes habilidades para aplicar en tu práctica de meditación, pero con ellas no ganarás el corazón y la mente de tu público en ninguna plataforma virtual.
Entonces, ¿cuál es el secreto para dar presentaciones virtuales de alto impacto? ¡Transmitir más energía! Estimula tus reuniones virtuales inyectando emoción tanto en tu contenido como en tu forma de transmitirlo. Recuerda que el objetivo de tu presentación virtual, como el de una presencial, es mantener a tu audiencia atenta e involucrada.
Aquí tienes algunos tips para infundir energía para que los tomes en cuenta:
1. Prepara tu contenido.
Desarrolla el contenido de tu reunión virtual de la misma manera que lo harías para una presentación presencial, es decir, con mucho tiempo de anticipación. Estructura tu presentación virtual en tres partes: introducción, cuerpo y cierre.
Cuando planees tu introducción, empieza con un “gancho”, define un propósito claro y desarrolla un programa. Luego, prepara el cuerpo (el “meollo del asunto”, cuando la verdadera acción sucede) e incluye historias, ejemplos, datos, estadísticas y gráficas. Cierra tu presentación con un resumen de los puntos que abordaste y con un llamado a la acción.
2. Rompe con el patrón.
Romper con el patrón es un concepto que funciona bien en las presentaciones virtuales. La idea es darle un giro al flujo normal de la información para tomar a tu público por sorpresa o sacarlos de su zona de confort.
¿Qué puedes hacer para alterar la naturaleza aburrida de la típica presentación predecible colmada de datos? Cuenta una historia vívida, comparte una estadística alarmante, muestra una imagen inquietante, levanta la voz o acelera tu ritmo.
Aunque no cuentes con tantas habilidades y técnicas a tu disponibilidad para las presentaciones virtuales, tienes suficientes. Si las empleas de manera creativa, puedes levantar el ánimo a tu audiencia y captar su atención.
Busca modificar el patrón cada cuatro o cinco minutos. Cuando incluyes estos cambios en la planeación de tu contenido, pronto tendrás a tu público comiendo de la palma de tu mano virtual.
3. Prepara tu bomba de energía.
Tus habilidades físicas, vocales y verbales te ayudarán mucho a generar y mantener la energía durante tu presentación virtual. ¡Utilízalas! Antes de la reunión, arranca en frío calentando tu voz y tu cuerpo.
Habla en voz alta, practica trabalenguas, canta una canción, sal a caminar o camina dentro de tu casa, sube y baja las escaleras, haz caras en el espejo, cualquier cosa que aumente tu ritmo cardíaco y te llene de energía.
Si hablas en voz alta y te mueves con rapidez, estarás haciendo más por generar energía para tu presentación de lo que imaginas. No olvides sonreír y levantar las cejas justo antes de ingresar a la reunión. Si estás feliz, ¡deja que tu cara lo diga!
4. Trabaja con tus familiares para establecer límites durante tus horas de trabajo privadas.
Por desgracia, la familia o tus compañeros de piso pueden drenar tu energía mientras presentas. Establezcan un sistema de colores con el que les hagas saber el tipo de reunión que estás teniendo:
El rojo significará “muy importante” (reunión con un cliente nuevo), lo que les indicará a todos que deben guardar silencio y no interrumpirte. El amarillo representará un menor grado de importancia (reunión con tu equipo de trabajo), pero necesitarás que estén callados. El Verde (reunión con un colega cercano) significará que pueden entrar a tu espacio sin que tengas que disculparte con tu interlocutor.
Establecer límites con un código de colores ayudará a todos a saber las reglas y seguirlas. Cuando no tienes que preocuparte por otras personas, puedes concentrarte en mantener tus niveles de energía durante toda la presentación.
Cuando hagas reuniones virtuales, no puedes depender únicamente de la influencia de la energía externa para darte el impulso para presentar. Más bien, puedes emplear las herramientas de eficacia comprobada de planeación, preparación y práctica para ayudarte con el trabajo. Aplica estas excelentes ideas. Y por nada del mundo dejes que tu gato se quede dormido en tu espacio de trabajo.
Angela DeFinis ofrece los servicios de coaching en discursos ejecutivos, capacitación en habilidades de presentación y capacitación en videoconferencias virtuales. Contáctala en definiscommunications.com.